La educación vial se inscribe en las competencias que forman parte de la formación ciudadana. Convivir en sociedad con otros y otras requiere marcos de acuerdo, protección y seguridad que resguarden el bienestar de sus miembros. Especialmente importante es que los adultos brinden protección, orientación y contención a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes para que estos logren desarrollar adecuadamente conductas de auto cuidado y protección del entorno, como una persona integral que vive en comunidad y en diálogo permanente con la sociedad.

El rol de los estudiantes como usuarios de las vías (peatones, pasajeros o ciclistas) determina derechos y responsabilidades que permiten una movilidad armoniosa y segura. Para lograr este objetivo se han establecido normas y diseños de vías que protegen y permiten ordenar el tránsito circulante.