El segundo año medio del colegio Cryptocarya alba tuvo el honor de presentar por segunda vez su adaptación moderna de “El Enfermo Imaginario” de Molière. Esta función especial se llevó a cabo en conmemoración del Día Mundial del Libro y la Lectura, un evento destinado a fomentar la pasión por la lectura y la apreciación de las grandes obras de la literatura mundial.

El escenario para esta ocasión fue el Teatro Municipal de Peumo. La adaptación de la obra clásica de Molière no solo conservó el humor y la crítica social del original, sino que también incorporó diálogos actualizados y referencias culturales que los estudiantes de hoy podrían reconocer y disfrutar.

Los jóvenes actores del colegio Cryptocarya alba, tras su exitoso estreno, volvieron a subir al escenario con una confianza renovada. Su compromiso y entusiasmo fueron evidentes en cada línea entregada y en cada gesto realizado. La interpretación de los personajes, desde el hipocondríaco Argán hasta la ingeniosa Toñita, se realizó con un profundo entendimiento de los temas y las motivaciones, añadiendo una capa de profundidad a la comedia.

Para esta segunda presentación, tuvimos el placer de contar con la presencia de estudiantes y profesores del colegio Mistral de Las Cabras. Su asistencia no solo enriqueció el evento, sino que también fortaleció los lazos entre nuestras comunidades educativas. La energía en la sala fue palpable, con aplausos y risas llenando el ambiente, lo que sin duda motivó aún más a nuestros actores.

Al final de la función, se realizó un momento especial de agradecimiento. Los estudiantes de Cryptocarya alba expresaron su gratitud hacia los visitantes del colegio Mistral, destacando la importancia de compartir experiencias culturales y artísticas entre colegios. Este gesto de camaradería fue bien recibido y aplaudido por todos los presentes, dejando un sentimiento de unidad y celebración común.

La función concluyó con felicitaciones y fotos, con estudiantes de ambos colegios intercambiando impresiones sobre la obra y sus interpretaciones. Fue una velada que no solo celebró a Molière y su legado literario, sino que también demostró cómo el teatro y la literatura continúan uniéndonos, superando las barreras del tiempo y el espacio.